Los clientes son un alegre familia que les encanta disfrutar de la vida exterior, de la vida al sol. De la misma manera, son unos enamorados de las barbacoas, de las reuniones familiares y amigos. 
Nos encontramos con el entorno exterior de la vivienda muy deteriorado y abandonado. Un exterior que en antaño fue cesped pero que en la actualidad era arena y malas hierbas. De la misma manera los límites de la parcela que daban con los vecinos no propiciaban ninguna intimidad ni continuidad.
Los clientes requerían un espacio alrededor de la piscina sin cesped, un entorno que nos les requiriera tanto esfuerzo para su mantenimiento en buen estado. De la misma manera buscaban tener un lugar de sombra para poder reunirse al aire libre y protegerse de la luz del sol.
Por todo ello planteamos un suelo continuo de hormigón pulido que recoge toda la actuación y da unidad a todo el proyecto. Siguiendo las estética de ameboide de la gran piscina existente, el suelo serpentea, se abre y se cierra para convertirse en una pequeña playa de arena, unos árboles para mejorar el soleamiento, una huerta, una gran zona ajardinada, un skatepark, una ducha, una hamaca colgada, una jardinera, una barbacoa...
En cuanto al problmea de refugio del sol proyectamos una gran cubierta exterior, que se acopla a la perfección a la vivienda, con un gran óculo central sobre la zona de reunión principal. Un apertura que enmarca el cielo y te abre la vista al infinito