La zona de niños de esta vivienda se compone de dos minidormitorios, un cuarto de juegos y un baño. 
Los dos minidormitorios de 7m2 se aislan del cuarto de juegos mediante dos grandes correderas que durante el día permanecerán abiertas para comunicar los tres espacios y ampliar la zona de juego, y por las noches se cerrarán para conseguir la intimidad necesaria de un dormitorio infantil.
Estas correderas tienen a su vez una minipuerta, una miniventana y una mesita abatible.
El baño tiene acceso desde los dos dormitorios y solamente contiene la bañera y el wc, al lavabo se encuentra en el cuarto de juegos y se oculta durante el día tras una de las puertas correderas.
Los minidormitorios únicamente tienen iluminación cenital a través de un lucernario y el baño recibe iluminación natural a través de una ventana que comunica con el cuarto de juegos, donde encontramos un enorme ventanal.
Tanto las correderas como los armarios son de DM lacado en blanco, con puntuales toques de color, el pavimento contínuo es de mortero cementoso y las paredes tienen un zócalo donde se ha utilizado laca como acabado para paliar las inevitables manchas de los niños. En el baño se utilizó azulejo amarillo para jugar una vez más con las notas de color.